Los ministros de Defensa y de Relaciones Exteriores de Japón reafirmaron el apoyo del país a Taiwán ante las recientes tensiones con China continental. El ministro de Defensa, Shinjirō Koizumi (小泉進次郎), subrayó la importancia de mantener la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán, mientras que el ministro de Relaciones Exteriores, Toshimitsu Motegi (茂木敏充), indicó que la reunión entre la primera ministra Sanae Takaichi (高市早苗) y el representante taiwanés Lin Hsin-i (林信義) durante la cumbre de APEC no contraviene la postura vigente del Gobierno japonés, pese a las protestas de Pekín.
El conflicto se originó el 31 de octubre y el 1 de noviembre, cuando Takaichi publicó en redes sociales fotos de su encuentro con Lin Hsin-i. El Ministerio de Relaciones Exteriores chino criticó la acción, afirmando que Japón “envía un grave mensaje equivocado a las fuerzas pro-independencia de Taiwán”. Japón respondió el 4 de noviembre reafirmando que su posición sobre la cuestión de Taiwán no ha cambiado.
Koizumi recordó que Taiwán es un socio económico y un amigo importante de Japón, con estrechos intercambios de personas y comercio. Señaló que la seguridad del tráfico marítimo es crucial, dada la dependencia del país del comercio internacional para energía y alimentos. La posición estratégica de Taiwán, en la convergencia del mar del Sur de China, el estrecho de Bashi, el mar de China Oriental y el Pacífico, la convierte en una línea de vida marítima esencial para Japón.
El ministro enfatizó que bajo la visión de un “Indo-Pacífico libre y abierto” es indispensable preservar la paz y la estabilidad regionales. Y agregó que el Ministerio de Defensa y las Fuerzas de Autodefensa se mantendrán preparados para mantener la paz y estabilidad regionales, y proteger la independencia, la seguridad y el bienestar de los ciudadanos japoneses. Por su parte, Motegi recordó que APEC reúne a 21 países y economías, y que Japón ha mantenido múltiples encuentros previos con representantes taiwaneses dentro de prácticas habituales, reforzando así su postura frente a las protestas de China continental.